jueves, 21 de enero de 2010

The Boat That Rocked

Genial, maestra, emotiva, tierna, provocativa, hilarante. No conozco tantas palabras como para describir qué tan buena me pareció esta película, ni para expresar todos los buenos sentimientos que produjo en mi ese sabado en la mañana en el que me desperté muy temprano y no pude volver a dormir.

Bill Nighy interpreta a Quentin, el "capitán" de un barco encargado de servir como establecimiento a la emisora pirata de música pop y rock más escuchada en el reino unido. A bordo, The Count (Philip Seymour Hoffman), Dr. Dave (Nick Frost), Simple Simon (Chris O'Dowd), Angus Nutsford (Rhys Darby) y otros más, se encargarán de hablar a los oidos de los adolescentes británicos ávidos de Rock n' Roll.
A bordo del barco llega el ahijado de Quentin, un chico "castigado" por consumir drogas en el colegio. Esto sirve de punto de partida para comenzar a conocer el heterogéneo staff de la emisora.

La feliz y libertina historia se complica cuando a un político le da por acabar con las emisoras piratas. Y aunque sus ataques al principio no le hacen daño al fuerte espíritu rebelde de los integrantes de la emisora, finalmente logra afectarles.

A mi me encantó esta película porque me hizo afianzar el amor que le tengo al rock. Me hizo entender que todo lo que uno pueda hacer por el, valdrá la pena y será divertido. Es una historia en la que se vive y muere por el rock (casi literalmente) y enseña que, a pesar de estar rodeado de un heterogéneo (y a veces traidor) grupo de personas, uno puede allí encontrar amigos.

Su banda sonora ? Kinks, Stones, Who, Beach Boys (creo)... solo faltaron The Beatles, pero creo que es imposible poner una de sus canciones en una película.

Además, retrata la linda relación que ya no existe entre los jovenes y los DJs. Ese nivel de intimidad y camaraderia que se lograba con alguien al otro lado del parlante. Para mi, que soy un nostálgico, es algo que dificilmente volverá a existir.

Veala para tener más motivos para amar el rock. Preferiblemente, comiendo pizza, tomandose una cerveza, rascandose las bolas y sin bañarse. La película le hará saber que usted no es el único rockero cochino en el mundo.

1 comentario:

Escudero dijo...

"Ese nivel de intimidad y camaraderia que se lograba con alguien al otro lado del parlante"

Usted lo ha dicho!

Aunque no me parece la mejor peli del mundo, para los que nos gusta el RNR es bastante divertida.